El Diablo viste a la moda es una película que cautivó al público en su estreno. La cinta cuenta la historia de Andy Sachs, una recién licenciada en periodismo que consigue un trabajo en la famosa revista de moda 'Runway' dirigida por la exigente y temida Miranda Priestly. La película se centra en la vida de Andy en la revista, su relación con su jefa y cómo su trabajo comienza a afectar su vida personal.
El Diablo viste a la moda retrata la industria de la moda de una manera cruda y real. La película muestra la presión constante y el estrés que se vive en esta industria, sobre todo en las revistas de moda, donde tener la última palabra en moda es vital. La cinta nos muestra cómo Andy comienza a sumergirse en este mundo y cómo comienza a creer que la moda es lo único importante en la vida.
La película también representa cómo la moda a menudo se percibe como superficial y sin sentido. A través de la personalidad de Miranda Priestly, queda claro que la moda no solo es importante por sí misma, sino que también es un reflejo de la cultura y la sociedad. Miranda es una mujer muy influyente y poderosa en la industria de la moda, y la película muestra cómo su vida a menudo se rige por su trabajo. En definitiva, El Diablo viste a la moda muestra que la moda es una industria que va más allá de la superficie.
La relación entre Andy y Miranda es uno de los principales puntos de la película. La película muestra cómo ambas mujeres provienen de mundos muy diferentes, Andy es una recién licenciada en periodismo que tiene poco conocimiento sobre la moda, mientras que Miranda es una experimentada editora de moda que está acostumbrada a trabajar con personas que saben exactamente lo que quieren.
Es interesante ver cómo la relación entre ambas mujeres evoluciona a lo largo de la película. Al principio, Andy siente que está por debajo de Miranda y que no puede cumplir con sus expectativas. Después de varios intentos fallidos de complacerla, Andy finalmente comienza a entender a Miranda y cómo piensa. Andy comienza a comprender que Miranda es muy exigente, pero que sus altas expectativas se deben a que es una mujer muy perfeccionista que quiere lo mejor para su revista. La relación entre ambas mujeres finalmente se fortalece a medida que Andy se integra más en el mundo de la moda y aprende a apreciar la estética y la habilidad necesarias para producir una revista de moda de alta calidad.
Una de las grandes fortalezas de El Diablo viste a la moda es su reparto. Meryl Streep en el papel de Miranda Priestly es simplemente perfecta. Streep da vida a Miranda de una manera que es difícil imaginar a cualquier otra actriz en su lugar. Su actuación muestra la fuerza y el poder de Miranda mientras se mantiene fiel a la complejidad emocional del personaje.
Además, la actuación de Anne Hathaway en el papel de Andy Sachs es igual de impresionante. Hathaway retrata a una joven periodista que tiene que aprender a adaptarse en un mundo desconocido con elegancia y gracia. Su personaje es el perfecto contrapunto a Miranda, ya que se muestra como una persona bastante realista y trabajadora que está tratando de entender el mundo de la moda.
El Diablo viste a la moda también explora cómo el trabajo puede afectar la vida personal. La lucha que tiene Andy para equilibrar su trabajo con su vida amorosa y personal es uno de los aspectos más interesantes de la película. Vemos cómo Andy comienza a alejarse de sus amigos y familia debido a su trabajo y cómo su relación con su novio comienza a deteriorarse a medida que pasa más tiempo en su oficina.
Esta parte de la película tiene un mensaje importante: aunque el trabajo es importante, no debe consumir la vida de una persona. Esta lucha es uno de los temas principales de la película, y la resolución de esta lucha es lo que permite a Andy liberarse del control de su trabajo y recordar lo que realmente importa en la vida.
En resumen, El Diablo viste a la moda es una película que no solo entretiene, sino que también tiene una profunda reflexión sobre la importancia de la moda y el equilibrio entre la vida laboral y personal. La película es una muestra de la habilidad de sus actores y su director para retratar temas complejos de una manera realista y fascinante. En definitiva, El Diablo viste a la moda es una película que no se puede dejar de ver.